La propuesta es un Israel para todos los israelíes, un Israel para todos sus ciudadanos. Para los electores que llevan en sus corazones los valores de la izquierda: paz, justicia, igualdad, democracia, derechos humanos para todos, feminismo, protección del medio ambiente, separación entre estado y religión. Hablo de una izquierda renovada que defina un nuevo modelo del Estado de Israel, con una sociedad civil participativa. Soy un israelí postsionista, no antisionista.
sábado, 5 de marzo de 2011
Guerras robóticas
Por George Monbiot
Cada mes se acumulan más evidencias que sugieren que los foros y las cadenas de comentarios online están siendo secuestrados por personajes que no son quienes parecen ser. El anonimato de la red da a las compañías y los gobiernos oportunidades de oro para realizar operaciones de astroturf: campañas fraudulentas de opinión de las bases, que crean la impresión de que un gran número de personas demanda, o se opone a ellas, determinadas políticas. Este engaño tiene más posibilidades de producirse donde los intereses de gobiernos o compañías entra en conflicto con los intereses del público. Por ejemplo, hay un largo historial de compañías tabaqueras que han creado grupos de austroturfing para oponerse a los intentos de regularlas.
Después de que escribí por última vez sobre el astroturfing online, en diciembre, se puso en contacto conmigo alguien para denunciarlo desde dentro. Formaba parte de un equipo comercial empleado, en nombre de clientes corporativos, para infestar los foros y cadenas de comentarios de Internet promoviendo sus causas y discutiendo con cualquiera que se opusiera a ellas. Como los otros miembros del equipo, se presentaba como alguien del público, sin intereses en el tema. O bien, para ser más precisos, como una multitud de miembros desinteresados del público: usaba 70 máscaras, tanto para evitar ser detectado como para crear la impresión de que había un amplio apoyo a sus opiniones en favor de las corporaciones. Revelaré más cosas de las que me dijo cuando haya finalizado la investigación, en la que estoy trabajando ahora.
Parece ser que estas operaciones están más extendidas, son más sofisticadas y más automáticas de lo que la mayoría de nosotros habíamos sospechado. Los correos electrónicos obtenidos por hackers políticos de una empresa estadounidense de ciber-seguridad, llamada HB Gary Federal, sugieren que se está desplegando un notable blindaje tecnológico para sofocar la voz de las personas reales.
Tal como ha informado el Daily Kos, los correos electrónicos muestran que:
- las compañías usan ahora un “software de gestión de máscaras” que multiplica los esfuerzos de los astroturfers que trabajan para ellas, creando la impresión de que existe un apoyo importante a lo que una corporación o un gobierno intenta hacer.
- este software crea todos los aditamentos en línea que una persona real poseería: un nombre, cuentas de correo electrónico, páginas web y medios sociales. Dicho de otro modo, genera automáticamente lo que parecen perfiles auténticos, resultando difícil ver las diferencias entre un robot virtual y un comentarista real.
- las cuentas falsas se pueden mantener actualizadas publicando automáticamente o vinculando con contenido generado en otra parte, lo que refuerza la impresión de que los dueños de las cuentas son personas reales y activas.
- a los astroturfer se les pueden asignar estas cuentas para crear un historial de apoyo, sugiriendo que han estado muy ocupados desde hace meses entrando en otras partes y relacionándose en los medios sociales. Nadie sospecharía que acaban de entrar en escena por primera vez hace un momento, con el único propósito de atacar un artículo sobre la ciencia del clima o argumentar contra los nuevos controles de la sal en la comida basura.
- mediante un uso astuto de los medios sociales, en palabras de la empresa de seguridad los astroturfer pueden “hacer que parezca que realmente hay una persona en un debate y se presenta ante los individuos clave como parte del ejercicio … Hay una gran variedad de trucos de los medios sociales que podemos usar para agregar un nivel de realidad a todas las personas ficticias”.
Pero posiblemente la revelación más inquietante es la siguiente. La Fuerza Aérea estadounidense ha tenido ofertas de compañías para obtener software de gestión de máscaras que realizarían las tareas siguientes:
a. Crear “10 máscaras por usuario, con sus antecedentes, historial, detalles de apoyo y ciber presencia, que sean técnica, cultural y geográficamente coherentes. … Esas máscaras deben ser capaces de parecer que tienen su origen casi en cualquier parte del mundo y de interactuar mediante servicios online convencionales y plataformas de medios sociales”.
b. Proporcionar automáticamente a sus astroturfer “direcciones IP aleatoriamente seleccionadas mediante las que pueden tener acceso a Internet”. [Una dirección IP es el número que identifica el equipo de una persona]. Estas se han de cambiar a diario, “ocultando la existencia de la operación”. El software también debería combinar el tráfico web del astroturfer con el de “multitudes de usuarios del exterior de la organización. Esta combinación de tráfico proporciona una cobertura excelente y una base poderosa para el desmentido”.
c. Crear “direcciones IP estáticas” para cada máscara, permitiendo que diferentes máscaras “parezcan la misma persona a lo largo del tiempo”. También debería permitir que las “organizaciones que frecuentan el mismo sitio o servicio cambien fácilmente las direcciones IP, para que parezcan usuarios ordinarios en lugar de una organización”.
Un software de este tipo tiene la posibilidad de destruir Internet como foro para un debate constructivo. Convierte en una burla la democracia online. Las cadenas de comentarios sobre cuestiones con importantes implicaciones comerciales ya han naufragado por lo que parecen ejércitos de trolls organizados: puede verse a menudo en los sitios de The Guardian. Internet es un regalo maravilloso, pero también es un filón para los grupos de presión corporativos, el marketing viral y los portavoces gubernamentales, que pueden operar en el ciberespacio sin regulación, sin tener que dar cuenta de lo que hacen y sin miedo a ser detectados. Permítanme la pregunta que he planteado en anteriores artículos y que todavía no ha obtenido una respuesta satisfactoria: ¿qué deberíamos hacer para combatir estas tácticas?
Traducido para Globalízate por Víctor García
Artículo original:
http://www.monbiot.com/2011/02/23/robot-wars
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Amigo Carlos,no solo eso que comentas, también hay organizaciones partidistas y con intereses ideológicos que crean o hasta prostituyen grupos monopolizandolos en la redes, como por ejemplo en Facebook. Solo tienes que echar un vistazo a los que pongo a continuación. Por cierto, soy el mismo gato, que nuevamente me han desactivado POR TERCERA VEZ la cuenta anterior, se han cebao conmigo los fachas de los grupos que han monopolizado prostituyendolos y desvirtuandolos, ATACANDO A LAS MUJERES AFIRMANDO QUE HAY MAS DENUNCIAS FALSAS QUE MALTRATOS Y EL SUPUESTO SAP ( Sindrome de Alienación Parental) Estos grupos son "Todos contra la violencia http://www.facebook.com/home.php?sk=group_107789335954835 y el grupo "Diario el Ecososialista foro de debate" http://www.facebook.com/home.php?sk=group_177633908915628
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