martes, 31 de mayo de 2011

La reconnaissance d’un Etat palestinien sur la base des frontières de 1967 est d’un intérêt vital pour Israël.


20 mai 2011
Nous, citoyennes et citoyens d’Israël, appelons la population à soutenir la reconnaissance d’un Etat palestinien démocratique comme une condition pour mettre un terme au conflit et parvenir à des accords acceptés sur la base des frontières de 1967. La reconnaissance d’un tel Etat palestinien est d’un intérêt vital pour Israël. Elle seule garantira la résolution de ce conflit par le biais de négociations sur des frontières définitives, avec possibilité d’échanges limités de territoires. Ce qui répond à l’essentiel des soucis de sécurité d’Israël. Le succès de la mise en œuvre des accords exige deux leaderships, israélien et palestinien, qui se reconnaissent mutuellement, optent pour la paix et s’engagent pleinement dans ce processus. C’est le seul moyen d’éviter le dangereux isolement d’Israël dans le monde. Seule cette politique permettra à Israël de maîtriser son destin et sa sécurité. Elle seule permettra aux développements politiques ultérieurs de se produire avec l’accord d’Israël de façon à garantir sa sécurité. Toute autre politique de la part d’Israël contredit les fondements du sionisme. Elle met en danger l’Etat lui-même et le peuple juif dans le monde.
Nous, soussignés, appelons donc toute personne éprise de paix et de liberté et toutes les nations à saluer la déclaration d’indépendance palestinienne, à aider et à agir pour encourager les citoyens des deux Etats à maintenir entre eux la paix sur la base des frontières de 1967 et des accords passés. La fin de l’occupation est une condition fondamentale pour la libération des deux peuples, le respect de la déclaration d’indépendance d’Israël et l’indépendance de l’Etat d’Israël lui-même.

Avraham Adan (« Bren »), général de division retraité, Prof. Haïm Adler, Prix Israël, Dr Yitzhak Arad, général de brigade retraité, ancien président de Yad Vashem, Menachem Aviram, général de brigade retraité, ancien commandant de la brigade des parachutistes, Colette Avital, ancienne consul à New York, Avner Azoulaï, ancien agent du Mossad, Prof. Elie Barnavi, ancien ambassadeur d’Israël en France, Mordechai Bar-On, général de brigade retraité, ancien officier principal de l’éducation, Prof. Yehouda Bauer, lauréat du Prix Israël, Prof. Haïm Ben-Shahar, ancien président de l’université de Tel Aviv, Prof. Naomi Chazan, ancienne membre de la Knesset, Ran Cohen, colonel retraité, ancien ministre du commerce et de l’industrie, Yaël Dayan, ancienne membre de la Knesset, Prof. Yaron Ezrahi, Prix de la fondation des sciences politiques, Shlomo Gazit, général de division, Président de l’université de Ben Gourion, Prof. Hanoch Gutfreund, ancien président de l’université de Jérusalem, Yoram Kaniuk, écrivain, Dani Karavan, lauréat du Prix Israël, Amos Lapidot, général de division, ancien commandant de l’aviation, Hanna Meron, artiste, lauréat du Prix Israël, Sami Michael, écrivain, Amos Oz, Prix Israël, Sefi Rachlevski, écrivain et expert en théologie juive, Giora Ram, général de brigade, ancien commandant de l’aviation, Yehoshua Sobol, dramaturge, lauréat de prix de théâtre, Prof. Zeev Sternhell, lauréat du Prix Israël, David Tartakover, lauréat du Prix Israël, Lia Van Leer, lauréat du Prix Israël, Prof. Menachem Yaari, lauréat du Prix Israël, président émérite de l’académie des sciences, Yirmiyahu Yovel, lauréat du Prix Israël, etc ...

Parmi les signataires français de l’Appel à la raison… Serge Blisko, David Chemla, Elie Chouraqui, Line Cohen Solal, Claude Cohen Tannoudji, Daniel Cohn-Bendit, Boris Cyrulnik, Elisabeth de Fontenay, Etienne Emile-Beaulieu, Alain Finkielkraut, Pierre Hassner, Serge Hefez, Danielle Hoffman-Rispal, David Kessler, Georges Kiejman, Patrick Klugman, Jack Lang, Claude Lefort, Ivan Levaï, Bernard Henri Levy, Pierre Nora, Vincent Peillon, Elisabeth Roudinesco, Henry Rousso, Pierre Schapira, Dominique Schnapper, Michel Serfaty, Maurice Szafran, Gérard Unger, Haïm Vidal Séphiha, Henri Weber, Michel Zaoui…

lunes, 30 de mayo de 2011

Los silencios locuaces de Netanyahu por Carlos Braverman


Benjamin Netanyahu dio un fuerte impulso a los palestinos para la declaración de la independencia de su estado en la Asamblea General de la ONU en septiembre. La larga lista de imposibilidades enumeradas en el Congreso de EEUU volvió a confirmar para las Naciones Unidas y la comunidad internacional en su conjunto la validez de una declaración unilateral del Estado Palestino independiente.
Netanyahu no puede seguir hablando sólo para AIPAC, los congresistas republicanos y sus socios coalicionarios, es el mundo ahora y en especial Obama y Clinton quienes le reclaman alguna frase coherente sobre lo que va a hacer. Un discurso que dilapida espacio y tiempo en hablar sobre el no , lo que aseveró que no va a hacer y no decir nada sobre lo que afirmó que sí, como estar dispuesto a dar fragmentos de su patria, está destinado a tener una baja nota de aprobación, creo que no logra eximirse, no aprueba el examen.
Una evaluación reciente en Nueva York sobre datos de agencias periodísticas occidentales, en base también a datos proporcionados por fuentes palestinas y de otros países árabes, predijo una mayoría de 135 de los 192 miembros para votar a favor de un Estado Palestino. Tras el discurso de Netanyahu, la mayoría podría subir a más de 160. En sentido contrario la apertura del paso fronterizo de Rafiaj es ante todo un gesto humanitario y por lo tanto Israel debe seguir el ejemplo abriendo los pasos fronterizos de Cisjordania hacia Israel. El retorno de la vida normal en Gaza podría alentar a sus ciudadanos para frenar el terrorismo. Estas señales serían propicias para hacer conocer que Israel abandona la ocupación y camino a setiembre está dispuesto a negociar todos los ítems pendientes como así después de la Asamblea General de la ONU, también es posible así volver a ganar amigos y reconciliarse con muchos otros pues estamos muy aislados y tenemos nuestras propias usinas de desligitimización.
Carlos Braverman
Tel Aviv Israel
30 de mayo de 2011
*Carlos Braverman (Israel): Politólogo y Psicólogo, miembro de la Asociación de Derechos Civiles de Israel. Activista por una coexistencia judéo-árabe mutuamente justa y el altermundialismo. Miembro del Partido Meretz (Partido Socialista de Israel - Tel Aviv). Presidente del Instituto Campos Abiertos (Investigaciones en Ciencias Políticas).
Derechos reservados: Instituto Campos Israel ISBN963-03- 0316- 2 מסת"ב

domingo, 29 de mayo de 2011

Silwan y datos sobre la Ciudad de David que no puede escuchar a su guía- Compaginado por Carlos Braverman


La Ciudad de David es uno de los sitios arqueológicos más significativos en nuestra región. Cada año, cientos de los miles de visitantes entran en él y disfrutan de un viaje fascinante por Jerusalén antigua. Sólo unos cuantos saben que este sitio s usado para promover el establecimiento judío en Jerusalén Este. Los colonos extremistas que controlan el sitio aprovechan a visitantes como usted para promover y financiar su orden del día político, ante todo prevenirse de una solución negociada con el conflicto Palestino-israelí.

Silwan: una geografía de la ocupación en Jerusalén Este
por María M. Delgado
Es viernes de mañana y tres compañeras del EAPPI salimos caminando hacia Silwan, un barrio palestino vulnerable de Jerusalén Este (ocupada y anexada ilegalmente por Israel desde 1967). Estoy de visita en la ciudad y decidí acompañar al equipo que cada viernes se hace presente en la oración que la gente del barrio hace a las 11 de la mañana, no en la mezquita, sino en una carpa que montaron hace dos años al borde de la calle, como forma de hacer visible su protesta por la violencia y amenaza de desalojo permanentes.
Después de atravesar la Ciudad Vieja y la explanada del Muro de los Lamentos, pasando por el costado de la Explanada de las Mezquitas, caminamos un par de cuadras hacia el sur en una pronunciada bajada, e inmediatamente el paisaje cambia: a nuestras espaldas, en lo alto, podemos ver la muralla de la Ciudad Vieja y las cúpulas de las mezquitas de Al-Aqsa y la Cúpula de la Roca; pero frente a nosotras -mientras caminamos por una calle llena de basura, de pozos y agua de lluvia, sin cordón, ni
Allí, apenas a un par de cuadras de la Ciudad Vieja, se lleva a cabo una lucha cotidiana por cada metro cuadrado de tierra, y por la interpretación de la historia. La zona es un objetivo prioritario del gobierno y de los colonos judíos ultra nacionalistas. La población palestina está siendo presionada y forzada a abandonar el barrio, y sobre la mayoría de sus modestas viviendas pesan amenazas de demolición: desde 1991, más de 40 casas palestinas han sido tomadas por la fuerza por colonos judíos; en noviembre de 2008, la municipalidad de Jerusalén demolió dos edificios de familias palestinas en Silwan, y en su lugar ahora hay un edificio de apartamentos habitado por colonos judíos ultra-derechistas. El objetivo último es dejar el área vacía de palestinxs para la construcción de la colonia israelí “La ciudad de David”, una pieza clave en el plan gubernamental de consolidar la anexión ilegal de Jerusalén Este.
Objetivo final: la judaización de Jerusalén Este
El gobierno israelí afirma que Silwan es un sitio arqueológico trascendente, pues supuestamente fue allí donde el Rey David construyó su palacio y estableció la capital de su reino hace 3000 años. Aunque esto no ha sido probado hasta ahora, es la historia que se cuenta a los 500.000 turistas que cada año visitan el “Parque Nacional Ciudad de David”, en una verdadera batalla por la opinión pública. Una extensa superficie ha sido convertida en modernas instalaciones del sitio arqueológico, con vigilancia privada, tiendas turísticas, sala multimedia, cafetería, zonas enjardinadas, pasarelas y terrazas desde donde los turistas observan el cerro hiperpoblado de pobrerío palestino, sin tener la menor idea de la situación que se vive allí.
“Aquí es donde todo comenzó”, dice el folleto y la película en 3D que se exhibe en el tour oficial de tres horas. El emprendimiento es un ejemplo elocuente de la arqueología, la historia y la religión puestas al servicio de objetivos políticos nacionalistas, según nos explicó Angela Godfrey, una integrante del Israeli Committee Against House Demolitions. Los 4000 años anteriores al rey David son tan ignorados por el discurso legitimador del proyecto como el 90% de la población palestina que vive y ha vivido en Silwan desde tiempos inmemoriales. Es por eso que algunos arqueólogos y activistas críticos (como el grupo Arqueología en Jerusalén: Pasado y Presente) han empezado a organizar tours alternativos para quienes quieran conocer la realidad pasada y presente del lugar en toda su complejidad (ver también enlaces a ICAHD y AIC más abajo).
Desde que en 1997 la empresa Elad recibió el permiso para hacer excavaciones en el sitio, el objetivo ha sido claramente -con el pretexto arqueológico- deshacerse de la mayor cantidad posible de población palestina. El plan es judaizar demográficamente Jerusalén Este, de manera que ‘los hechos consumados’ hagan imposible que sea la capital del Estado Palestino en el futuro.
En los últimos años, los incidentes de violencia en el barrio se han incrementado, debido a las agresiones frecuentes de los colonos, de sus guardias de seguridad o de la policía israelí contra los residentes de Silwan, que mantienen una resistencia activa para defender su territorio de la amenaza de despojo.
Una bomba a punto de estallar
En Silwan viven unas 55.000 personas, de las cuales más del 50% tiene menos de 18 años. Aunque sus habitantes -como el resto de la población palestina de Jerusalén- pagan impuestos igual que los israelíes, reciben poco o nada a cambio. En el barrio no hay plazas, ni canchas deportivas, ni escuelas suficientes (la que existe está superpoblada), ni clínica, ni agua potable, ni recolección de basura, ni mantenimiento de alumbrado o vialidad, ni biblioteca, ni centros comerciales, ni nada. La gente ni siquiera tiene permitido construir, ampliar o reparar sus casas, ni hacer la mínima modificación en ellas (lo cual es una condena al hacinamiento en una población con una tasa demográfica altísima como la palestina).
De hecho, muchas familias temen que en cualquier momento sus casas serán demolidas por la municipalidad de Jerusalén (ya que la mayoría han sido construidas sin permiso, por la sencilla razón de que es imposible obtenerlo), o serán desalojadas para entregárselas a los colonos (como está ocurriendo en el barrio de Jeikh Jarrah). En este momento hay más de 100 órdenes de demolición pendientes en Silwan, y los colonos ya controlan el 60% de la tierra. En muchos casos, la gente no es expulsada por la fuerza, sino que es inducida a malvender sus casas, bajo amenaza de desalojo, chantaje, o fraude.
“Ellos están haciendo lo imposible para que nos vayamos”, nos dijo un líder comunitario. “Pero no nos vamos a ir a ninguna parte. No hay adonde ir. No vamos a ser refugiados ni parias en ningún país. Ésta es nuestra tierra, y aquí nos vamos a quedar”.
Como cada viernes, la gente -o más bien dicho: los hombres- se fue juntando junto a la carpa antes de la oración. Efectivamente es un mundo donde las mujeres no aparecen públicamente. Sabemos que están en sus casas preocupadas y angustiadas por la seguridad de sus hijos y maridos, que en cualquier momento y con cualquier pretexto pueden ser deportados temporalmente del barrio, o detenidos por un día, una semana, un mes, un año o más, sin cargos ni explicaciones. En muchos casos la libertad se obtiene pagando (de 1000 a 3000 dólares, sumas exorbitantes en un barrio donde predomina el desempleo masivo), porque la corrupción es una de las facetas ocultas pero más dinámicas de la ocupación. En un mundo donde las fuerzas del orden no tienen que rendir cuentas ante nadie por sus arbitrariedas contra la población palestina, pagar es muchas veces la única manera de zafar de los abusos cotidianos (cuando se consigue el dinero para hacerlo). Por otra parte, para las autoridades israelíes meter en la cárcel a los dirigentes es la forma más barata y fácil de desarticular cualquier forma de Un líder barrial nos habló de la preocupación de la comunidad por el futuro de sus niños y jóvenes. Sin educación, sin recreación, sin posibilidades de trabajo, sin futuro, y con la única perspectiva segura de pasarse la juventud entrando y saliendo de la cárcel -o peor aun: de entrar y no salir por varios años- por el delito de tirar piedras contra las fuerzas de ocupación (única forma de canalizar sus energías juveniles en un ambiente opresivo), nosotras nos preguntábamos qué sería de esos niños llenos de vida en unos pocos años… Y nos sorprendíamos, una vez más, de que en ese caldo de cultivo del despojo, la exclusión y la humillación cotidiana no surjan más respuestas violentas o desesperadas…
“Nosotros tratamos de hacer cosas, de ofrecerles oportunidades, de crear algún proyecto -nos decía el mismo dirigente- pero las autoridades no nos dejan. No tenemos permitido construir un centro comunitario o educativo, ni nada. Las ONGs no pueden o no quieren ayudarnos, porque no podemos conseguir los permisos legales, y sin ellos no quieren arriesgarse”.
Mientras conversamos con los dirigentes comunitarios, cantidad de niños merodean alrededor nuestro, se ríen, intentan hablar en inglés con nosotras, juegan y parlotean entre ellos, y buscan la comunicación, que como siempre se da intercambiando y repitiendo nuestros respectivos nombres. La mañana es helada y tenemos que movernos todo el tiempo para contrarrestar el frío.
Uno de los líderes nos habla de los mil problemas que enfrentan en Silwan; uno de los más graves, la permanente represión y prisión de sus jóvenes, e incluso de los niños. Es una realidad sobre la que organizaciones dedicadas a la infancia y de DDHH intentan permanentemente llamar la atención de la comunidad internacional para presionar a Israel a que cumpla con los estándares internacionales relativos a la prisión de menores.
Nuestro interlocutor nos presentó a algunos niños que, con diez u once años, ya han estado tres veces en la cárcel, donde además los golpean y maltratan (uno de ellos nos mostró las marcas en el rostro de su última detención). Su delito: ser palestinos, ser jóvenes y tirar piedras para desahogar la bronca contra la policía que los reprime. Ha habido casos en que jóvenes palestinos fueron asesinados por guardias de seguridad privada de los colonos que viven en los alrededores (usurpando tierra palestina), por considerarlos una amenaza a su seguridad.
Rezos, represión y resistencia
Poco a poco la carpa se llena de hombres, y los que no entran tienden sobre la calle sus alfombras y se arrodillan a rezar. Vemos a muchos padres que llegan con sus hijos pequeños. La oración comienza como siempre con las letanías del imán, y se prolonga por más de media hora. Se percibe la tensión en el aire, porque todos saben que después de la oración vendrá la represión, como cada viernes.
Los niños que jugaban con nosotras ahora están en la ladera de enfrente a la carpa, donde también nos ubicamos para mantener una respetuosa distancia y a la vez tener una vista de la zona. Todos los ojos se vuelven a cada rato en dirección a la Ciudad Vieja, Los niños no se quedan un minuto quietos, están llenos de vitalidad, se ríen, gritan, trepan. De pronto los vemos venir hacia nosotras para traernos a cada una un ramito de flores que recogieron en el terreno; son las pequeñas amapolas silvestres que cubren los campos anunciando el comienzo de la primavera. Nosotras, conmovidas, les agradecemos y festejamos, lo que los hace correr a buscar más y más flores para regalarnos junto con sus sonrisas radiantes y su parloteo festivo.
Al terminar la oración nos acercamos a la carpa para saludar a un hombre mayor que es uno de los líderes más respetados de la comunidad. Nos explica que estuvo a punto de no venir porque está engripado, pero cuando escuchó las noticias y supo del terremoto en Japón, decidió que tenía que venir a rezar por ese pueblo, y por el de Libia, y por el de Palestina… “y por Israel, porque también hay gente buena allí”, nos dijo.
De golpe sentimos un grito, un estampido, y vimos a todos los jóvenes y niños correr en distintas direcciones: calle arriba, hacia los cerros, hacia las casas; la policía había llegado y empezaba el juego perverso de cada viernes: sin ningún motivo, mientras la gente estaba conversando a la salida de la oración, empezó el despliegue gratuito de violencia, con estallido de granadas de ruido y gases lacrimógenos de una inusual potencia e intensidad, que en un par de segundos nos dejaron sin poder respirar. Nosotras también corrimos calle arriba, alejándonos del lugar, pero el humo de los gases nos perseguía ahogándonos.
De pronto una puerta se abrió y una mujer nos agarró del brazo para que entráramos a refugiarnos en su modesta peluquería de barrio. Mientras su única clienta esperaba con la tintura en el pelo, ella nos hizo sentar, nos trajo pañuelos y café, nos sonrió; intentamos comunicarnos por señas, con vocablos en árabe y en inglés, para agradecerle su hospitalidad. Desde su balcón trasero pudimos ver la calle donde todavía corrían jóvenes escapando de los gases, mientras otros, ya resguardados en lo alto de sus viviendas sobre la ladera del cerro, tiraban piedras hacia los policías.
La desigual batalla duró un largo rato, más de una hora; por celular pudimos saber que los policías estaban incursionando en las casas y pasadizos para buscar a los jóvenes-niños lanza-piedras y llevárselos detenidos. Pudimos entender mejor la rabia impotente de los hombres y el terror de las mujeres, que -según nos contaron- los viernes intentan de cualquier forma mantener a los hijos encerrados en su casa para evitar que se los lleven presos o los lastimen…
Mientras salíamos del barrio veíamos todavía, en el cerro, el ‘fuego cruzado’ de piedras y gases lacrimógenos sobre algunas azoteas. Al pasar de nuevo por la “Ciudad de David” nos dimos cuenta que el mismo ‘espectáculo’ era observado por un grupo de elegantes turistas, ajenos por completo a la realidad presente de Silwan. Cuando el viento trajo hasta el lugar un resabio de los potentes gases, otro grupo recién llegado se preguntaba qué ocurría. También escuchamos a un grupo de adolescentes judíos norteamericanos comentar con novelería aventurera que se trataba de gases lacrimógenos de verdad…
El contraste surrealista entre esos dos mundos me hizo recordar lo que nos contó Angela Godfrey cuando nos dio un tour geo-político por Jerusalén Este, mostrándonos un moderno y elegante complejo de viviendas construido en la cima de uno de los cerros de Silwan: las empresas venden esas propiedades a judíos norteamericanos bajo el eslogan “Haga realidad su sueño: tenga su apartamento en la Tierra Prometida”, sin decirles que están construidos en tierras confiscadas a los palestinos; y sólo al llegar los compradores descubren que sus viviendas de vacaciones están ubicadas en ‘territorio enemigo’…
De pronto recordé que, antes del estampido y la corrida, había guardado las flores en un bolsillo de mi chaleco. Las busqué y allí estaban, un poco asfixiadas después de los gases, como nosotras. Busqué con la mirada a los niños, pero ya no estaban; seguramente habían disparado a esconderse (o quizás a tirar piedras) por los recovecos de su barrio. Pero sus sonrisas parecían dominar todavía el paisaje de Silwan, igual que las amapolas silvestres cubren los campos palestinos en esta época. Aquí la gente dice que cada pequeña flor es el alma de un mártir que renace en la primavera.

Este articulo está basado en dos visitas presenciales a Silwan (febrero y marzo 2011) y en el artículo “Alternative Information in Silwan”, de Oddvar Bjorge, en la publicación del EAPPI: “Un Unjust Settlement. A tale of illegal Israeli Settlements in the West Bank” (Ginebra, 2010).
Para más información sobre la situación de Jerusalén Este, recomiendo visitar los sitios web de UNOCHA OPT, del Israeli Committe Against House Demolitions También las fichas del EAPPI: “Jerusalem: the right to reside” y “Jerusalem: Identity under attack”.
El Programa Ecuménico de Acompañamiento en Palestina e Israel (PEAPI-EAPPI) tiene por objeto apoyar los esfuerzos locales e internacionales para poner fin a la ocupación israelí y conseguir una solución al conflicto Israelo-Palestino con una paz justa, basada en el derecho internacional y en las pertinentes resoluciones de las Naciones Unidas.

Misión

La misión del PEAPI es acompañar a los palestinos e israelíes en sus acciones no violentas y realizar esfuerzos concertados de promoción y defensa de la justicia para terminar con la ocupación. Los participantes en el programa realizan el seguimiento de las violaciones de los derechos humanos y del derecho humanitario internacional e informan al respecto, apoyan actos de resistencia no violenta junto con palestinos cristianos y musulmanes y pacifistas israelíes locales, ofrecen protección por medio de una presencia no violenta, participan en la promoción de políticas públicas y, en general, se mantienen en solidaridad con las iglesias y con todas las personas que luchan contra la ocupación.


Acerca de María M. Delgado
María M. Delgado es una activista de derechos humanos, co-fundadora del Servicio Paz y Justicia (SERPAJ) en su Uruguay natal. También trabajó varios años para el Servicio Internacional para la Paz (SIPAZ) en Chiapas (México), y colaboró con Jubileo Sur-Américas, el Women Peacemakers Program de IFOR (Holanda) y el Fund for Nonviolence (California). María tiene un master en Gender & Peacebuilding (UPEACE). Ha participado en el Foro Social Mundial y en otras redes globales por la justicia social, la justicia climática y la justicia de género. Su vocación es apoyar a personas y comunidades -en particular a las mujeres- que sufren injusticia y exclusión en situaciones de conflicto y violencia política. En ese sentido, se siente afortunada de ser una de las primeras acompañantes del EAPPI provenientes de América Latina.

Movimiento Solidaridad en Ras el Amud por Carlos Braverman


Un vídeo muy informativo de la protesta de Solidaridad en Ras el Amud el viernes pasado. Violencia de la policía, violencia de los colonos y detenciones sin ninguna razón. Los vídeos con el baile de los colonos - con títulos en el hebreo - son de dos días antes, en el mismo lugar, cuando sostuvieron una ceremonia de toma de posesión para el nuevo compuesto en Ras el Amud.

sábado, 28 de mayo de 2011

Victimizazadas por rabinos que no saben de Dios por Shulamit Aloni


Original: http://www.haaretz.com/print-edition/opinion/victimized-by-rabbis-who-lack-god-s-image-1.331389. En español Carlos Braverman
De achivo: diciembre de 2010
Shulamit Aloni es militante por los derechos civiles en Israel, ex dirigente de Meretz, fue diputada y ministra. Nota de C.B.
Mientras menosprecian a la mujer, los rabinos difamadores, que la alejan y humillan, denigran a Dios, dado que ella fue creada y bendecida por Él y su sentencia es equivalente a la del hombre. Ambos son "Personas", creadas a su semejanza.

Dos documentos están predestinados a enseñarnos la esencia del Estado de Israel y sus características. Uno, conocido y reconocido, es "la Declaración de la Independencia". Se estudia en las escuelas y depende de las instancias del gobierno para el conocimiento de todos.
En el segundo figuran los principios fundamentales del primer gobierno israelí electo, aceptados por unanimidad por los miembros del primer Parlamento el 11 de Marzo de 1949.
La primera coalición gubernamental estaba formada por el Partido Avodá (en ese entonces MAPAI) y la fracción "Frente Religioso Unido" que fusionó a los cuatro partidos religiosos: Mizrahi, Hapoel Hamizrahi, Agudat Israel y Poalei Agudat Israel, una lista única que obtuvo 16 mandatos.
En dicho acuerdo, el primer capítulo de los lineamientos básicos trata sobre la responsabilidad conjunta de todos los partidos por las acciones del gobierno y resoluciones, mientras que el segundo asegura: "la seguridad, la igualdad y la democracia".
Estos son los conceptos establecidos:
"Por ley que basimentará el lineamiento democrático y republicano en el Estado de Israel, se asegurará la absoluta igualdad en los derechos y obligaciones para todos los ciudadanos sin diferencias de religión, raza o nacionalidad. Se asegurará la libertad de credo, conciencia, expresión, educación y cultura.
Habrá absoluta igualdad de la mujer, de sus derechos y obligaciones en la vida del país, en la sociedad, en la economía y en todo el sistema legislativo. Tendrá vigencia la libertad de agrupación y libertad de expresión oral y escrita, salvaguardando la seguridad del Estado, su libertad e independencia, respetando los derechos del prójimo".
Hermoso documento, aunque no fue fácil asegurar a la mujer "igualdad plena de derechos y obligaciones en la vida del país, la sociedad, la economía y el sistema de leyes". No fue fácil, pero lo logramos en gran forma, en el terreno legal, en la promoción de mujeres, ampliando sus conocimientos e intervención. Actualmente no son menos capaces intelectualmente en sus conocimientos y en el cumplimiento de sus funciones nacionales que los hombres.
Y he aquí, que últimamente cayó sobre nosotros el extremismo y la ignominia de los hombres ultraordoxos en todas sus manifestaciones, que unificaron sus fuerzas haciendo causa común con sus arcaicos rabinos, con el propósito de execrar a las mujeres y alejarlas de la sabiduría de la Torá: La ignominia en el Muro de los Lamentos, el menosprecio en la entrada en los autobuses por la puerta trasera, el tener que sentarse alejada de sus familias. Para ellos, una niña de siete años ya es una mujer y debe viajar en la parte trasera de un autobús.
Dichos hombres ultraortodoxos expulsan a las mujeres de las calles de la ciudad para que puedan pasar "sin peligro" "los hombres de negro". Toda esta conducta es una gran vergüenza para Israel. Ellos dicen, con hipocresía denigrante, que actúan acorde a las leyes de la Torá.
Se trata de una flagrante mentira. Ellos denigran la Torá y los actos de creación de Dios. Lean el capítulo 1 en el Libro Génesis "Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; macho y hembra los creó. Y bendiciéndolos dijo Dios: "Creced y multiplicaos y colmad la tierra y sojuzgadla; y dominad a los peces del mar a las aves del cielo y a todo animal que se desplaza sobre la tierra" (Génesis; 1:26-28). No hay indicios en la Torá de que el hombre sea superior a la mujer, ambos fueron creados a imagen de Dios.
Pero el caso es aún peor. Mientras menosprecian a la mujer, la alejan y la humillan, ellos denigran a Dios, dado que ella fue creada y bendecida por Él y su sentencia es equivalente a la del hombre. Ambos son "Personas", creadas a su semejanza.
Abran el Capítulo V del Libro Génesis, párrafos 1 y 2, y lean en voz alta: "Este es el libro de los descendientes de Adán: Cuando Dios creó al hombre, lo hizo a su semejanza. Hombre y mujer los creó, y los bendijo. Y el día que fueron creados, llamó el nombre de ellos Hombre."
¿Será que los rabinos difamadores y los parásitos alumnos de sus seminarios, que insultan a las mujeres y se aprovechan de su capacidad laboral, actúan en nombre de la Torá? ¿La Torá de quién? La Torá como está escrita en la Biblia, o la Torá de los ultraortodoxos que viven a costa de la población y de sus mujeres arrinconadas en la parte trasera de los autobuses y en las márgenes de las veredas.
Nada me convencerá, ni a mujeres como yo, de que los rabinos que blasfeman - como el gran rabino de Shas - son mejores "Personas", creadas a imagen de Dios, que las mujeres trabajadoras que los sustentan, que forman familias e intensifican los conocimientos de sus hijos.
Debemos dar nuestra opinión por la vergüenza que crece entre nosotros, y todo en nombre de la arrogancia. La jactancia y la holgazanería no tienen fin. De todas maneras, el alma de Dios desapareció en aquellos que menosprecian a las mujeres, y todas fueron creadas a imagen de Dios.

¿Y ahora? Por Felipe González


El Gobierno debe agotar la legislatura y seguir promoviendo en profundidad las reformas ya iniciadas. En cuanto al PSOE, me inclino por una candidatura única surgida de una reflexión en el Comité Federal
EL PAÍS-FELIPE GONZÁLEZ 27/05/2011

La derrota electoral ha sido muy dura y hay que reconocerlo sin paliativos. Hay que felicitar al PP, aunque no haya tenido un comportamiento responsable ante ninguno de los problemas de España. Incluso en el día de hoy, cuando hago esta reflexión, llevan al Parlamento la grave situación del empleo juvenil sin hacer ninguna propuesta constructiva, algo que sea creíble y dé una cierta tranquilidad en que cambiarían de posición, para ser responsables ante la crisis, después de su victoria electoral.
Tengo la impresión de que el castigo severo al Gobierno y a los responsables de ayuntamientos y autonomías ha ido más allá de lo que propios y ajenos podían imaginar. Así se abre un nuevo escenario en el que serán decisivas las reacciones de unos y de otros.
No se puede esperar que cambie de posición el PP. Sus dirigentes, eufóricos, seguirán pensando que la estrategia basada en el "mientras peor mejor" les ha dado resultado y ha dañado gravemente al Partido Socialista. Siempre lo han hecho así en los últimos 20 años, sea en la lucha antiterrorista o sea frente a la crisis mundial más grave conocida.
¿Por qué habrían de cambiar? Sería tanto como pedirles que antepusieran los intereses de España a su deseo incontenible de ocupar el poder: incluso "todo el poder", como esperan. En lo que reste de legislatura van a ocultar lo que quieren hacer con ese poder. Por dos razones: porque piensan que así les va mejor y porque, realmente, dudo que lo sepan. La insistente apelación a la "confianza" es poco compatible con la que inspira su líder, según muestran todas las encuestas.
Pero lo que me importa hoy es la reacción de los socialistas, para ver si somos capaces de remontar estos resultados convenciendo a los ciudadanos de las necesidades que tiene nuestro país frente a la crisis y en el contexto europeo y global en el que estamos.
Zapatero no se presenta. Ha reconocido errores en el tiempo para afrontar la crisis, pero ha tomado decisiones muy duras de reformas estructurales y mantiene su voluntad de proseguirlas. También ha asumido la derrota, él mismo, directamente, en un gesto que le honra, aunque las elecciones no eran generales.
Por tanto, la primera cuestión es decidir quién y con qué propósito se hace cargo del liderazgo frente a las elecciones generales. Mejorar la valoración personal de Rajoy como líder no es un problema. Entre los dirigentes conocidos del Partido Socialista hay varios que cumplen de sobra ese requisito. Y plantear un programa frente a "la vaciedad del mundo en la oquedad de sus cabezas" tampoco.
Importa decidir pronto y mirando hacia los ciudadanos, sin tentaciones endogámicas de partido tan propias de las circunstancias que vivimos. Y hablo de los ciudadanos, de lo que seamos capaces de percibir de la opinión pública, más que de la "opinión publicada", tan propensa en estos tiempos a la intriga y la confusión de intereses.
El procedimiento para designar a esa persona está previsto. Yo me inclino por una reflexión interna en el Comité Federal que nos conduzca a una sola candidatura de consenso. Eso evitará peleas internas incomprensibles para los ciudadanos, dados los problemas a los que nos enfrentamos y los escasos tiempos de nuestro calendario político. Ante un desacuerdo, que no deseo, en el Comité Federal, Rodríguez Zapatero tiene la llave. Puede convocar congreso extraordinario para elegir candidato y secretario general. Camino algo más largo pero posible, como he oído decir a algunos dirigentes del partido.
La segunda cuestión, que parece suscitar dudas y debates incipientes, es el discurso programático ante la ciudadanía. Hay fórmulas participativas fáciles de articular para que todos vayamos unidos a la campaña de las generales.
Nadie espera de mí que no me "moje" en cuanto a contenidos, como saben que no entraré en un debate de primarias que no veo oportuno, aunque estaré, con mi criterio, siempre disponible para este partido al que he dirigido y contribuido a que sea la alternativa de poder desde criterios socialdemócratas durante gran parte de mi vida.
Por eso me atrevo a reiterar que la realidad a la que nos enfrentamos como país es crítica y exige reformas en profundidad. Estas han empezado y hay que seguirlas, reorientarlas y explicarlas clara y abiertamente a la ciudadanía. No estaré por oportunismos de cambios radicales de orientación que nos lleven a un desastre que, como mínimo, estamos evitando si vemos con claridad las derivas de otros países que no han sabido o podido afrontar esas reformas.
Sé por experiencia, dentro y fuera de nuestras fronteras, que la crisis global que padecemos marcará un antes y un después y que las cosas no volverán a ser como antes, aunque haya cantos de sirena que lo anuncien. Por eso huyo de los mensajes simplistas de los que dicen que hay que "volver a la senda de la prosperidad perdida", típicos de las derechas en la oposición, porque es "esa senda" la que nos ha llevado a esta crisis tan dramática. Algunos no quieren ver que sin correcciones de fondo podemos estar incubando la siguiente crisis, antes incluso de salir de esta.
Temo las voces que proponen utopías regresivas, que han demostrado hasta la saciedad que llevan al fracaso. Las hay de izquierdas y de derechas. Radicalizaciones que pretenden que el Estado sustituya a la sociedad, a los actores económicos o, por el contrario, los que van a seguir defendiendo (lo están haciendo con éxito) que funcionemos de acuerdo con "la mano invisible del mercado" como elemento de autorregulación, sin intervención del Estado.
El Estado tiene que ser eficiente y austero; tiene que regular el funcionamiento del mercado, en particular del mercado financiero, al servicio de los intereses generales; tiene que preservar la distribución del ingreso garantizando y haciendo sostenible la sanidad pública, educación para todos y pensiones; tiene que estimular la iniciativa y facilitar el emprendimiento y la innovación, etcétera.
Nos vamos a jugar mucho como sociedad, como país, en esta difícil situación nacional, europea y global. Por eso tenemos que tener proyectos claros y sostenidos de salida de la crisis que preserven valores, bienes sociales que hemos ido conquistando con esfuerzo y que pueden estar en peligro.
Además, los dirigentes de hoy tienen que saber que los grandes desafíos ante la crisis global se juegan en un campo que trasciende las fronteras del Estado nación al que pertenecemos. Por eso es tan importante, tan decisivo, el papel de Europa... ¡y tan decepcionante que no lo esté cumpliendo o lo haga con tan poca visión de conjunto! Nadie puede creer que los agentes financieros globales que nos han llevado a esta crisis puedan ser regulados desde un solo país.
Tenemos que actuar dentro de nuestras fronteras en aquello que podemos y debemos corregir para ganar productividad, competitividad y empleo. Los agentes sociales y económicos tienen que empujar en la misma dirección.
Tenemos que hacer propuestas claras y sostenidas en la Unión Europea para reforzar los elementos de gobernanza económica en el espacio monetario que compartimos; para emplear la potencialidad del Banco y del Fondo Europeo de Inversiones; para completar una buena regulación -igual para todos- del funcionamiento del sistema financiero.
Ya pasaron las elecciones y no podemos parar la marcha del país para salir de la crisis. Para España, lo mejor es continuar las reformas, agotando ese tiempo democrático que resta de legislatura. En menos de un año los ciudadanos decidirán en qué manos ponen esa salida y con qué propósitos. Es la hora de la verdad. Demostremos que somos la mejor respuesta para nuestra sociedad.
Felipe González fue presidente del Gobierno español de 1982 a 1996.

La democracia es también para el invierno


Por JOSÉ ANDRÉS TORRES MORA. El País 28/05/2011
El lunes pasado, las voces todavía maltrechas de algunos de mis compañeros de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE delataban el esfuerzo de la campaña. La mía también. Recuerdo bien cómo se me rompió la voz. En mitad de una plaza empecé un mitin en un tono muy alto y luego no hubo manera de bajarlo, así que durante un cuarto de hora largo defendí al presidente Zapatero y al Gobierno socialista a grito pelado.
Ahora, tras una severa derrota, no voy a decir lo contrario de lo que sostuve con tanta pasión por las plazas de nuestros pueblos. No iré contra mis propios actos. Es verdad que el millón y medio de electores que nos dieron su confianza hace cuatro años y que ahora nos la han retirado merecen que exploremos y atendamos sus razones para no votarnos; pero también es verdad que los votos de los seis millones que han permanecido fieles a nuestro proyecto merecen como mínimo igual respeto. No es fácil conciliar esa contradicción, pero conciliar contradicciones es el trabajo de la política; y del éxito en ese trabajo depende el futuro del socialismo español.
Después de una derrota, resulta más que obligado decirle a los ciudadanos que hemos entendido el mensaje y que lo vamos a atender. Sin embargo, no es fácil entender el mensaje. Porque lo que tenemos la noche electoral no es un mensaje, sino la suma de muchos mensajes, gran parte de ellos contradictorios. No es fácil deducir del resultado de las elecciones si el PSOE ha de girar a la izquierda o al centro, por la sencilla razón de que la mitad de los electores que se nos han ido son de izquierdas, pero la otra mitad se divide a partes iguales entre personas que se califican de centro y personas que no saben decir cuál es su ideología cuando se les pregunta.
Unos y otros nos fueron abandonando en diferentes momentos y por diferentes razones. Primero nos retiraron su apoyo una parte de las personas "sin ideología" y de centro. Su marcha coincidió con las críticas a la falta de competencia del Gobierno para identificar y resolver la crisis. Más tarde se marchó una parte de nuestros electores de izquierdas, coincidiendo con la subida del IVA después del verano de 2009, y con las reformas, y las críticas a las reformas, de mayo de 2010.
¿Eran ambos ataques insuperables? Los economistas más reputados de nuestro país previeron durante la campaña electoral de 2008, y para ese año, un crecimiento del 2,5; obtuvimos uno del 0,9. Nadie les ha acusado de engañar a los ciudadanos, ni se ha cebado con su incompetencia como algunos han hecho con el presidente Zapatero. En cuanto a la gestión de la crisis, conviene recordar que una crisis consiste en la suspensión de la normalidad, es decir, que resulta muy complicado tener un plan contra la crisissi no se conoce el plan de la crisis. Y las crisis no suelen contar sus planes a los seres humanos, incluso aunque sean los economistas del FMI, que hasta un mes antes de la crisis de la deuda soberana que nos llevó a los recortes de mayo exigían políticas expansivas.
Así que para ganar a los de centro, en lugar de girar a la derecha, bastaría con convencerlos de nuestra competencia económica. Después de todo, y diciendo la verdad, uno puede dejarse la garganta en las plazas de España gritando que si la economía de España no ha sido intervenida, a diferencia de las de Grecia, Irlanda y Portugal, es porque el presidente Zapatero y su Gobierno han sido más competentes que otros.
Para ganar a los de izquierdas es posible que el Gobierno pueda hacer políticas más a la izquierda, pero lo que es bastante improbable es que las haga el PP. Y, sin embargo, ha habido un número suficiente de electores de izquierdas que, en lugar de votar a IU, por ejemplo, se han quedado en sus casas y permitido que gobierne el PP. Quizá además de las políticas tengamos que hacer algo más.
Como pauta general, electoralmente nos suele ir mejor en los pueblos que en las ciudades, mejor allí donde las relaciones entre el partido y los electores son inmediatas que allí donde están mediadas por los medios de comunicación. La derecha tiene una supremacía abrumadora en los medios de comunicación. No es frecuente que las personas ricas estén dispuestas a invertir su dinero en medios cuyas líneas editoriales sean favorables a la izquierda, y también es cierto que, en ocasiones, desde los medios que siguen habitualmente la mayoría de los socialistas hay profesionales más interesados en apoyar a sus aliados dentro del partido que en informar a sus lectores con rigor y objetividad. Es verdad que esto también pasa en la derecha. Los poderes no democráticos de nuestras sociedades están consiguiendo que los ciudadanos se concentren en el control y debilitamiento de sus representantes, mientras dichos poderes campan poderosos e incontrolados por los lugares más sensibles de la vida social, incluidos los medios de comunicación.
Dicho esto, sabiendo todo el mundo que las elecciones municipales movilizan mucho menos voto que las generales, baste recordar que la abstención en las municipales de 2007 fue del 36% y en las generales de 2008 fue del 26%, los populares se empeñaron en convencer a sus electores de que el 22 de mayo se trataba de unas generales, y los socialistas nos empeñamos en convencer a los nuestros de que se trataba del gobierno de su calle. Se ve que ambos tuvimos éxito en nuestra estrategia, y los electores del PP se movilizaron como si fueran generales, y los del PSOE se desmovilizaron como si fueran locales. Ciertamente la publicación de la EPA con casi cinco millones de parados no ayudó mucho a centrar la atención en los temas locales.
Hasta aquí he querido aproximarme de manera sumaria a un diagnóstico de lo que nos ha ocurrido a los socialistas en estas elecciones. Lo que está ocurriendo después no es mejor.
Durante estos años hemos blasonado de que somos los más democráticos, de que no usamos el dedazo. Hemos presumido de que a nuestros candidatos los eligen los afiliados en una elección directa. Nos hemos dado democráticamente esas normas, y no por primarias, sino en un congreso; no por los militantes de base en una asamblea, sino por los compañeros y compañeras más experimentados, que son los que suelen ir a los congresos.
Yo me sentiría fracasado como dirigente de mi partido, si tuviera que decirle a mis compañeros que lo he llevado a tal situación de debilidad que para preservar su unidad es mejor que renuncien a una elección verdadera, y por tanto reñida, del candidato. Me sentiría fracasado si tuviera que decirles que lo he llevado a un estado de excepción en el que es necesario suspender los procedimientos que dan la decisión a las bases, para poner en marcha los procedimientos que dan la decisión a las élites. Y, desde luego no se me ocurriría, después de haber llevado al partido a esa situación, pedir que me dieran todo el poder a mí. Yo no creo que esta sea la situación del PSOE; pero en todo caso, no imagino una situación tan grave en la que el miedo haga a un socialista entregar su decisión a otros. Siempre que aparece un hombre providencial que nos exige que le entreguemos todo el poder para salvarnos debemos negarnos, sea cual sea la amenaza. Este es el precio que se paga por ser libre.
José Andrés Torres Mora es miembro de la Comisión Ejecutiva del PSOE.

viernes, 27 de mayo de 2011

Destacadas personalidades israelíes firmaron una carta abierta instando a los líderes europeos a un Estado Palestino. Síntesis Carlos Braverman


Alrededor de 20 destacadas personalidades israelíes de izquierda firmaron una carta abierta instando a los líderes europeos a apoyar una resolución a favor del establecimiento de un Estado palestino independiente en las Naciones Unidas, en septiembre.
Convocados por el Movimiento Solidaridad, entre los firmantes del petitorio se hallael ex portavoz de la Knéset (Parlamento) Abraham Burg (foto), el ex director general del Ministerio de Exteriores Alon Liel, el ex jefe de la Comisión del Servicio Estatal Iztjak Galnoor, y el ex embajador israelí en Sudáfrica y en las Filipinas, Ilan Baruj.
Entre los académicos que se sumaron a la carta abierta se encuentra el Premio Nobel, profesor Daniel Kahneman, el ex presidente de la Academias de Ciencias de Israel, Menajem Yaari, y los Premios Israel, Yuval Yermiahu, Avichai Margalit y los escritores Nir Baram, Lea Eini y Ronit Matalon.
Dada la "sospecha mutua y las dilaciones" tanto
Por parte de los israelíes como de los palestinos, la declaración la independencia de Palestina "no es sólo un derecho, sino también un paso positivo y constructivo a favor de ambas naciones", señalaron los firmantes.
"Como ciudadanos israelíes, declaramos que si la nación palestina declara un estado independiente y soberano, que exista al lado de Israel en paz y seguridad, apoyaremos esta declaración y vamos a reconocer a un estado palestino basado en las fronteras de 1967, con intercambios de territorio acordados", agregaron.
Además, los signatarios afirmaron que el reconocimiento de Israel hacia el gobierno de turno de la Franja de Gaza traería, a su vez, el reconocimiento recíproco de Israel.
"Hacemos un llamado a las naciones del mundo a declarar su voluntad de reconocer un estado palestino independiente basado en estos principios", continuaba la carta. "Este reconocimiento establecerá el marco y los parámetros para las negociaciones pertinentes sobre los detalles de un acuerdo entre los dos estados."
El doctor Alon Liel, quien firmó la carta, dijo a Ynet por qué decidió hacer suyo el movimiento.
"Soy de los que piensan y sueñan que es importante contar con un Estado palestino a pesar de que esto no es factible en formaprevisible", dijo. "Creo que si no hay voto en septiembre por el reconocimiento de un Estado palestino, nos encontramos a nosotros mismos en una pendiente resbaladiza de un estado compartido, que será una verdadera catástrofe."
"Estoy menos preocupado por la violencia y más preocupados por el apartheid", el ex director general del Ministerio de Relaciones Exteriores, dice. "Creo que tenemos que agitar la esperanza entre los que están perdiendo la esperanza de que un Estado palestino sigue siendo posible. Incluso sino habrá amistad, un Estado palestino hostil es preferible a nada en principio
Síntesis de Haaretz y Ynet web de Yediot Ajaronot. de Carlos Braverman

Crimen y castigo por Gideon Levy. Traducido al español por Carlos Braverman


Original en hebreo de Haaretz: http://www.haaretz.co.il/hasite/spages/1228712.html
Este es el crimen y su castigo: Israel, lanzó un arrogante "no" a Estados Unidos, y USA no va a perdonar ni olvidar. Deberíamos estar agradecidos a Obama. En su discurso de la noche del viernes expuso la verdad desnuda: el primer ministro Benjamin Netanyahu no quiere la paz. También deberíamos estar agradecidos al primer ministro: en la noche del viernes dijo al fin la verdad y puso término a los engaños de su discurso de Bar-Ilan, a las promesas de las "30 palabras mágicas" que iba a pronunciar el martes en el Congreso y a su "compromiso con los dos Estados". Netanyahu no quiere un Estado palestino. Punto.
En el nuevo mundo que imagina Obama no hay sitio para ocupaciones militares indefinidas, para imágenes como la Operación Plomo Fundido, para disparos contra manifestantes y para checkpoints. No hay acuerdo sin Estado palestino, y no hay Estado palestino sin las fronteras de 1967. El áspero “no” de Netanyahu, que es el áspero “no” de Israel, resonará hasta los confines de la tierra.
Y por si eso no fuera suficiente, otra mentira consensuada ha sido puesta en evidencia: Israel no es un verdadero amigo de los Estados Unidos. Un amigo no se comporta así, sobre todo cuando depende tanto del otro. Esta tarde, en la conferencia del American Israel Public Affairs Comité (AIPAC), donde todo el mundo entonará loas a la gran amistad entre los dos países y a sus valores comunes, deberíamos recordar que esta amistad es terriblemente unilateral: es la amistad de Estados Unidos hacia Israel.
Ahora ese insolente "no" hará que la gran potencia adopte duras medidas. Esa es la realidad hoy (para quejas y preguntas, dirigirse a Netanyahu). Los Estados Unidos tienen tres opciones. Una es distanciarse otra vez del problema. Eso sería, como mínimo, un desastre. Desde la perspectiva estadounidense significaría el fin de todos sus esfuerzos estratégicos para tocar los corazones de los países árabes. Israel -contra el cual el tiempo corre de forma tan terrible y para el cual 1967 se está convirtiendo en 1947 y Carmiel en Ariel- debería rezar para que tal cosa no suceda.
La segunda opción de Obama es hablar con los israelíes por encima de su líder. Eso no funcionará. Incluso si Obama hiciera lo que hizo Sadat, se presentara en la Knesset y nos hablara directamente diciéndonos cómo nuestro primer ministro está poniendo en peligro nuestro futuro y socavando las relaciones con nuestro único aliado, ni siquiera entonces los israelíes despertarían del letargo invernal (y estival) en el que les ha sumido la vida muelle que llevan. En Israel no hay mayoría ni a la derecha ni a la izquierda. La mayoría se encuentra sumida en un estado de espantosa indiferencia.
Hay una tercera vía, aparentemente más difícil en el caso de Israel que en el de los demás: la vía de la presión. El primer paso debería ser un voto de EEUU en las Naciones Unidas a favor del Estado palestino. Luego vendría el aislamiento -no será agradable arreglárselas con la única ayuda de Micronesia-, recortar las ayudas y finalmente el abandono. Aunque podría causar pánico en Jerusalén y no menos en Tel Aviv, esta es la única manera de demostrar la verdadera amistad a Israel. Netanyahu ha dicho (a todos los efectos) que ese es el camino. No ha dejado otra alternativa.
Obama, que afortunadamente estará con nosotros seis años más, ha vuelto a mostrar determinación, al menos en las palabras; sus actos son ahora la prueba del nueve. Verdaderos patriotas israelíes que ven a dónde se dirige su país, que entienden que el cambio ya no vendrá desde dentro, deben confiar con cierto bochorno en que la presión se produzca desde el exterior. No tienen otra esperanza. Sí, señor Presidente, si es usted un verdadero amigo, ahora es el momento de presionar.
Realizar un llamamiento al presidente de los Estados Unidos para que presione a Israel es algo muy problemático para un israelí. A tal situación nos ha traído Netanyahu. Un primer ministro que habla en términos añejos del ayer sobre la "cintura estrecha" y sobre la ridícula necesidad de estacionar tropas en el río Jordán, que sólo habla de las cosas a las que dice no y no dice nada de aquellas a las que dice sí, que propaga falsas angustias y ninguna esperanza, que dice no a EEUU y a cualquier oportunidad, una persona así daña la seguridad de Israel más que todos los que proponen estrechas fronteras y que todos los izquierdistas traidores juntos. Este Netanyahu ha hecho una invitación a los Estados Unidos para que castigue a Israel. Esa es al parecer la única forma que existe para que los israelíes despierten de la pesadilla que se está fraguando ante sus propios ojos.
Tal vez solo cuando se nos haga más difícil llegar a Macy's comprenderemos que tenemos que abandonar Efrat(4). Al fin y al cabo, más israelíes visitan Macy's que Efrat.

Dos estudios sobre la mujer y la sensualidad en el Cantar de los Cantares+ Vídeo


LA MUJER AMANTE EN EL CANTAR DE LOS CANTARES –
EROS DESCARADO de Bonna Devora Haberman
El Cantar de los Cantares, tradicionalmente atribuido al Rey Salomon durante su lasciva juventud, es el texto bíblico más sensual. El texto se nutre de la exuberancia y la fertilidad de la tierra de Israel como marco para los amantes y su pasión amorosa. La lectura tradicional tiende a interpretar el texto como una alegoría del amor entre el Eterno y el pueblo judío. Sin embargo los sabios discutieron si incluir o no el Cantar entre los textos bíblico, habida cuenta de que el material es provocativo y despierta pasiones. Una de las características más sorprendente de la poesía es la desinhibida representación de los deseos, la sexualidad y el comportamiento sexual femenino.
Fuentes Bíblicas ¡Béseme él con los besos de su boca! Porque tu amor es mejor que el vino. Tus ungüentos tienen una agradable fragancia. Tu nombre es como un ungüento derramado (Cantar de los Cantares 1:2-3)
No miréis porque que soy morena, Porque el sol me miró. Los hijos de mi madre se
airaron contra mí, Me hicieron guardián de viñas; Y mi viña, que era mía, no guardé.
(Cantar de los Cantares 1:6) Mi amado es para mí un manojito de mirra, Que reposa entre mis pechos. (Cantar de los
Cantares 1:13) 16. Levántate, Aquilón, y ven, Austro: Sopla mi huerto, despréndanse sus aromas.
Venga mi amado a su huerto, Y coma de su dulce fruta. (Cantar de los Cantares 4) 10. Mi amado es blanco y rubio, Señalado entre diez mil. 11 Su cabeza, como oro
finísimo; Sus cabellos crespos, negros como el cuervo. 12 Sus ojos, como palomas junto á los arroyos de las aguas, bañados con leche, y descansando en las orillas. 13 Sus mejillas, como una era de especies aromáticas, como fragantes flores: Sus labios, como lirios que destilan mirra que trasciende. 14 Sus manos, como anillos de oro engastados de jacintos: Su vientre, como claro marfil cubierto de zafiros. 15 Sus piernas, como columnas de mármol fundadas sobre basas de fino oro: Su aspecto como el Líbano, escogido como los cedros. 16 Su paladar, dulcísimo: y todo él codiciable. Tal es mi amado, tal es mi amigo, Oh doncellas de Jerusalem.
Lo busqué, y no lo hallé; Lo Llamé, y no me respondió. Me hallaron los guardas que
rondan la ciudad: Me hirieron, me llagaron, (Cantar de los Cantares 5:6-7)
Debate Tálmudico
El Rabino Yehuda dice, “El Cantar de los Cantares transmite impureza a las manos”
sobre Eclesiastés dice, “hay discrepancia”. El Rabino Yossi dice, “Eclesiastés no
transmite impureza a las manos, sobre el Cantar de los Cantares hay discrepancia”.
El Rabino Akiva dice: “¡El cielo no lo permita! Ni una sola persona entre los israelitas discute si el Cantar de los Cantares convoca a la impureza de las manos, porque el mundo entero no merece el día en que el Cantar de los Cantares fue entregado a Israel.
Todos los escritos son sagrados, pero el Cantar de los Cantares es el más sagrado de los sagrados. Si discutieron fue sobre Eclesiastés”…. Y así se resolvió. Temas para el análisis
En el primer capítulo la amante expresa su baja condición social. Es de la tierra, trabaja bajo el rayo del sol, es salvaje y libre, no atiende su propio viñedo. ¿Cuál es la relación, tal vez la tensión, entre la pasión y el orden social?
Muchas veces fue interpretado como una alegoría de la relación entre el Eterno y el
pueblo judío, ¿que expresa el erotismo de este texto en cuanto a la relación y al anhelo espiritual?
Lleno de descripciones sensuales, el Cantar destaca en particular el estímulo olfativo.
Emanan del texto los aromas del jardín y las especies exóticas. Según la
neuropsicología, el sentido del olfato aumenta e intensifica la memoria emocional.
Cuando la fruta del Jardín del Edén tienta a Eva, se menciona la belleza visual y el
gusto, no el aroma. ¿Porque es tan importante este sentido en el Cantar?
La analogía entre la mujer y el jardín, su exuberancia, su belleza y fertilidad son temas dominantes en el Cantar. ¿Qué implicancias tiene esta analogía para la mujer, su cuerpo y su identidad?
La representación del amante desde la perspectiva de la mujer es excepcional.
Considere la imagen del cuerpo, las metáforas y las asociaciones. ¿Como se comparan
con la imagen contemporánea del hombre?
La ciudad, según el pasaje relacionado con la joven mujer prometida, debería ser segura
sin embargo el campo y los jardines son los espacios seguros para la mujer amante del
Cantar de los Cantares. A pesar de que la mujer busca estridentemente a su amor en la
ciudad, los guardias abusan de ella. En medio de un poema de amor, ¿que significado
tiene este terrible pasaje en el quinto capítulo del Cantar de los Cantares?
Los códigos de pureza proponen inversiones, tal como se describe en el debate
talmúdico del Cantar en la Biblia Hebrea, un libro sagrado que expresa impureza. ¿Es
un criterio para ser incluido o excluido en el canon sagrado del pueblo judío? ¿Cuales serían las justificaciones del Rabino Akiva para afirmar enfáticamente que el Cantar de los Cantares debe ser incluido por su santidad?
Enlaces para el estudio
Para escuchar a una serie de versiones de los cantos del Cantar, y buscar otros recursos:
http://ccat.sas.upenn.edu/~jtreat/song/
Un debate sobre algunos de los temas del alma y del cuerpo que surgen del midrash del
Cantar de los Cantares
http://etext.lib.virginia.edu/journals/ssr/issues/volume3/number2/ssr03-02-r05.html
Un punto de vista tradicional y contemporáneo del Cantar como una alegoría
http://www.yhol.org.il/features/aggadot/aggadot22.htm
Audre Lorde es pionera en el tema de la perspectiva feminista sobre el poder de lo
erótico. Un resumen en http://www.english.uiuc.edu/maps/poets/g_l/lorde/erotic.htm Resumen de los temas
La extrovertida pasión desenfrenada de la(s) amante(s) en el jardín es sensacional. Los ricos elementos sensoriales vibran en los poemas, especialmente el olfato. El lector entra en la perspectiva interna de la mujer, que desafía muchas normas de género y convencionalismos sociales. A pesar de, o por su sensualidad radical, los sabios decidieron incluir el Cantar dentro del canon bíblico.
Cuestiones de Metodología Disculpándose por, e ignorando su sexualidad explícita, muchos ven la poesía estrictamente como teología y alegoría. Una lectura minuciosa, sin embargo, muestra una perspectiva provocativa del poder y la vida erótica que expresa la mujer y la conexión de esta apasionante experiencia de vida con el deseo espiritual y hasta místico.
¿Qué aspectos del texto le son más importantes?


Shir ha Shirim, El Cantar de los Cantares
Según una antigua costumbre ashkenazí se lee el libro “El Cantar de los Cantares” (“Shir haShirim”) en público en el Shabat de Jol Hamoed Pesaj, antes de la lectura de la Torá.
“El Cantar de los Cantares” es una colección de poemas de amor entre un amante y su amada, y entre una amante y su amado. Los Sabios analizaron mucho este libro, y la mayoría de sus interpretaciones indican que el mismo es un ejemplo de las relaciones entre El Santo Bendito Sea (el “amante”) y el pueblo de Israel (la “amada”).
Unas de las frases que mereció este libro viene del Rabi Akiva: “...Nada tuvo valor en el mundo como el día que fue entregado `El Cantar de los Cantares' al pueblo de Israel... Pues todos los escritos son sagrados, pero `El Cantar de los Cantares' es lo sagrado entre lo sagrado” (Iadim 3,5).
¿Qué es lo “sagrado entre lo sagrado” que vieron los Sabios en “El Cantar de los Cantares”?
El tema de relación de pareja entre Dios y el pueblo de Israel se desarrolla en muchas fuentas además de en “El Cantar de los Cantares”, sus intérpretes y comentaristas. Así, por ejemplo: “Cuando el pueblo de Israel salió al exilio, El Santo Bendito Sea pidió consuelo como el miembro de una pareja que perdió a su compañera: `Consolad, consolad a Mi pueblo...”' (Isaías 40:1). “Dijo El Santo Bendito Sea: ¿A quién hay que consolar cuando muere la esposa? ¿No es acaso a su marido?” (Ialkut Shimoni, Isaías, 443).
A esta relación de pareja se le dio un sentido sensual que permite que la misma se siga manteniendo a pesar de la herida que sufrió uno de los lados. Así, por ejemplo, sobre el versículo: “Un manojito de mirra es mi amado para mí” (El Cantar de los Cantares 1:13), interpreta Rabi Ieho- shúa ben Levi: “Dijo el pueblo de Israel ante El Santo Bendito Sea: A pesar de que amarga mi vida y me causa angustia dormirá entre mis pechos” (Ialkut Shimoni, Shir haShirim, 984).
Y en el Midrash Tanjuma 96:14 aparece el tema de los celos: “Como el marido cela a su mujer, así El Santo Bendito Sea siente celos... Como está escrito: `Y como goza el esposo con la esposa, así gozará contigo tu Dios”' (Isaías 62:5). El gozo o la alegría del corazón y la sensibilidad exigen un cuidado especial contra toda posibilidad de daño a la lealtad o desviación de la conducta esperada.
Quizás el punto máximo del desarrollo de esta idea es el mito del Zohar sobre la unión entre El Santo Bendito Sea y la Providencia (Shjiná). En este mito, la Providencia -que se encuentra en el lugar más cercano al mundo de los seres humanos- debe despertarse con pasión para incitar a la Divinidad a unirse a ella, y esta unión traerá bendición al mundo. El pueblo de Israel es el principal responsable del despertar de la Providencia. Es interesante destacar en este punto que, en realidad, en la literatura rabínica casi no vemos en la relación entre El Santo Bendito Sea y el pueblo de Israel este asunto de quién lleva la iniciativa. Las fuerzas eran, de cierta manera, iguales. Es decir, la dinámica de las relaciones era balanceada y a veces, incluso la iniciativa era de El Santo Bendito Sea. Y las partes eran El Santo Bendito Sea y el pueblo de Israel.
En el Zohar, este balance ya no existe. Los “protagonistas” principales son El Santo Bendito Sea y la Providencia. Así, por ejemplo, según el Zohar: “El despertar de arriba (la Divinidad) no ocurre sino cuando hay despertar abajo (la Providencia), ya que el despertar de arriba, depende de la pasión de abajo” (Zohar, parte 1, 86, pag. 2).
Es decir, que hasta que la Providencia no se despierta, la Divinidad no se despierta hacia ella. ¿Y de qué depende el despertar de la Providencia? De las acciones del pueblo de Israel. Es decir, así como las buenas acciones pueden llevar a la unión, también las malas acciones pueden llevar al corte de relaciones entre la Providencia y El Santo Bendito Sea. Pero en todo caso, no hay otra relación directa entre el pueblo y su Creador, sino mediante la Providencia que, según la leyenda, salió al exilio después de la destrucción del Gran Templo de Jerusalén.
Si en la situación anterior la relación era dinámica entre dos amantes, El Santo Bendito Sea y el pueblo de Israel-, en el Zohar vemos un cuadro diferente: Nosotros, como seres humanos, debemos esforzarnos para atraer la atención de El Santo Bendito Sea hacia nosotros.
Primavera, florecer, despertar de la Naturaleza, despertar de sentimientos, ¿quién no conoce la sensación maravillosa de renovación de la vida que nos trae la Primavera? Quizás, especialmente por eso, hay un indicio oculto en la lectura de “El Cantar de los Cantares” en el Shabat de Pesaj: Que podamos despertarnos juntos con la Providencia aquí entre nosotros, y así despertar a El Santo Bendito Sea para “renovar nuestros días como antaño”.
Editado por el Instituto Schechter de Estudios Judaicos, la Asamblea Rabínica de Israel, el Movimiento Conservador y la Unión Mundial de Sinagogas Conservadoras.

jueves, 26 de mayo de 2011

Las 14 características del fascismo


El Dr. Lawrence Britt, politólogo, escribió un artículo acerca del fascismo que apareció en la revista Free Inquiry, una revista de corte humanista. El Dr. Britt estudió los regímenes fascistas de Hitler ( Alemania), Mussolini (Italia), Franco (España), Suharto (Indonesia) y Pinochet (Chile). El encontró que estos regímenes tienen 14 puntos en común , los cuales llamó: "las características que identifican al fascismo"

Las catorce características son:
1. Nacionalismo poderoso y permanente.

Los regímenes fascistas tienden a hacer constantes el uso de frases, slogan, símbolos, canciones y otra parafernalia patriótica. Las banderas se ven por todos lados, así como los símbolos de la bandera en ropa y desplegada públicamente

2. Disgusto por el reconocimiento de los Derechos Humanos.

Debido al miedo a los enemigos y a la necesidad de seguridad , el pueblo en los regímenes fascistas es persuadido que los Derechos Humanos deben ser ignorados, en algunos casos por "necesidad". El pueblo tiende a mirar de otra forma e inclusive a aprobar la tortura, ejecuciones sumáriales, asesinatos , largas encarcelaciones de prisioneros etc.

3. Identificación de los enemigos o chivos expiatorios como una causa unificada.

El pueblo es conducido a un frenesí patriótico sobre la necesidad de eliminar un peligro percibido como común en forma de enemigo, ya sean las minorías raciales, étnicas, religiosas, liberales, comunistas, socialistas, terroristas etc.

4. Supremacía de lo militar.

Aunque existan muchos problemas domésticos , a los militares se les da una cantidad desproporcionada de soporte financiero y la agenda domestica es descuidada. Soldados y militares en servicio son vistos como glamorosos.

5. Sexismo rampante.

El gobierno de las naciones fascistas tiende a ser dominado casi en su totalidad por el sexo masculino. Bajo los regímenes fascistas tradicionales, se hace más rígida la importancia del género. La oposición al aborto es alta, así como la homofobia y las legislaciones anti gay en la política nacional.

6. Control de los medios de comunicación.

Algunas veces los medios son controlados directamente por el gobierno, en otros casos los medios son controlados indirectamente por las regulaciones gubernamentales, o por persuasión a los periodistas y censura a los ejecutivos, especialmente en tiempos de guerra.

7. Obsesión con la Seguridad Nacional.

El miedo es usado como una arma motivacional por el gobierno para controlar las masas.

8. La religión y el gobierno están entremezclados.

Los gobiernos en las naciones fascistas tienden a usar la religión predominante en el país como arma de manipulación de la opinión pública. La retórica religiosa y la terminología común es usada por los líderes del gobierno, aun cuando los jerarcas religiosos estén diametralmente opuestos a las acciones y políticas del gobierno.

9. El poder corporativo es protegido.

La aristocracia industrial y de los negocios de las naciones fascistas usualmente son quienes ponen a los líderes del gobierno en el poder, creando una beneficiosa relación empresas / gobierno con la elite de poder.

10. El poder Laboral es suprimido.

Porque las organizaciones de poder laboral son las únicas amenazas de los gobiernos fascistas, los sindicatos y asociaciones laborales son eliminados.

11. Desprecio por los intelectuales y las Artes.

Las naciones fascistas tienden a promover y tolerar una abierta hostilidad a la educación superior y la academia. No es poco común que profesores y otros académicos sean censurados e inclusive arrestados. La expresión libre del arte es atacada y los gobiernos usualmente se rehúsan a financiar las artes.

12. Obsesión con el crimen y el castigo.

Bajo los regímenes fascistas se le dan poderes casi ilimitados a las fuerzas represivas legales. La gente a menudo es obligada a hacerse la vista gorda sobre los abusos policiales e inclusive a abandonar libertades civiles en el nombre del patriotismo. Existe a menudo una fuerza policial nacional con poderes ilimitados en naciones fascistas.

13. Rampante amiguismo y corrupción.

Los regímenes fascistas casi siempre gobiernan con grupos de amigos y asociados que se posicionan unos y otros en los cargos gubernamentales y usan el poder gubernamental y la autoridad para proteger a sus amigos de la responsabilidad de rendir cuentas. No es infrecuente que en los regímenes fascistas los líderes gubernamentales se apropien en inclusive roben descaradamente los recursos y tesoros nacionales.

14. Elecciones fraudulentas.

Algunas veces las elecciones en las naciones fascistas son un verdadero fraude. Otras veces las elecciones son manipuladas por campañas difamatorias en contra de los candidatos opositores e inclusive el asesinato de los mismos. También usan las legislaciones para el control del número de votos, el control políticos distrital y la manipulación de los medios de comunicación. Las naciones fascistas también usan típicamente a sus tribunales de justicia para manipular y controlar las elecciones.

El Fascismo Eterno por Humberto Eco


El fascismo fue, sin lugar a dudas, una dictadura, pero no era cabalmente totalitario, no tanto por su tibieza, como por la debilidad filosófica de su ideología. Al contrario de lo que se puede pensar, el fascismo italiano no tenía una filosofía propia: tenía sólo una retórica.
La prioridad histórica no me parece una razón suficiente para explicar por qué la palabra «fascismo» se convirtió en una sinécdoque, en una denominación pars pro toto para movimientos totalitarios diferentes. No vale decir que el fascismo contenía en sí todos los elementos de los totalitarismos sucesivos, digamos que «en estado quintaesencial». Al contrario, el fascismo no poseía ninguna quintaesencia, y ni tan siquiera una sola esencia. El fascismo era un totalitarismo fuzzy. No era una ideología monolítica, sino, más bien, un collage de diferentes ideas políticas y filosóficas, una colmena de contradicciones.
El término fascismo se adapta a todo porque es posible eliminar de un régimen fascista uno o más aspectos, y siempre podremos reconocerlo como fascista. A pesar de esta confusión, considero que es posible indicar una lista de características típicas de lo que me gustaría denominar Ur-Fascismo, o fascismo eterno. Tales características no pueden quedar encuadradas en un sistema; muchas se contradicen mutuamente, y son típicas de otras formas de despotismo o fanatismo, pero basta con que una de ellas esté presente para hacer coagular una nebulosa fascista.

1. Culto de la tradición, de los saberes arcaicos, de la revelación recibida en el alba de la historia humana encomendada a los jeroglíficos egipcios, a las runas de los celtas, a los textos sagrados, aún desconocidos, de algunas religiones asiáticas. Cultura sincrética, que debe tolerar todas las contradicciones. Es suficiente mirar la cartilla de cualquier movimiento fascista para encontrar a los principales pensadores tradicionalistas. La gnosis nazi se alimentaba de elementos tradicionalistas, sincretistas, ocultos. La fuente teórica más importante de la nueva derecha italiana, Julius Evola, mezclaba el Grial con los Protocolos de los Ancianos de Sión, la alquimia con el Sacro Imperio Romano. Si curiosean ustedes en los estantes que en las librerías americanas llevan la indicación New Age, encontrarán incluso a San Agustín, el cual, por lo que me parece, no era fascista. Pero el hecho mismo de juntar a San Agustín con Stonehenge, esto es un síntoma de Ur-Fascismo.

2. Rechazo del modernismo. La Ilustración, la edad de la Razón, se ven como el principio de la depravación moderna. En este sentido, el Ur-Fascismo puede definirse como irracionalismo.

3. Culto de la acción por la acción. Pensar es una forma de castración. Por eso la cultura es sospechosa en la medida en que se la identifica con actitudes críticas.

4. Rechazo del pensamiento crítico. El espíritu crítico opera distinciones, y distinguir es señal de modernidad. Para el Ur-Fascismo, el desacuerdo es traición.

5. Miedo a la diferencia. El primer llamamiento de un movimiento fascista, o prematuramente fascista, es contra los intrusos. El Ur-Fascismo es, pues, racista por definición.

6. Llamamiento a las clases medias frustradas. En nuestra época el fascismo encontrará su público en esta nueva mayoría.

7. Nacionalismo y xenofobia. Obsesión por el complot.

8. Envidia y miedo al "enemigo".

9. Principio de guerra permanente, antipacifismo.

10. Elitismo, desprecio por los débiles.

11. Heroismo, culto a la muerte.

12. Transferencia de la voluntad de poder a cuestiones sexuales. Machismo, odio al sexo no conformista. Transferencia del sexo al juego de las armas.

13. Populismo cualitativo, oposición a los podridos gobiernos parlamentarios. Cada vez que un político arroja dudas sobre la legitimidad del parlamento porque no representa ya la voz del pueblo, podemos percibir olor de Ur-Fascismo.

14. Neolengua. Todos los textos escolares nazis o fascistas se basaban en un léxico pobre y en una sintaxis elemental, con la finalidad de limitar los instrumentos para el razonamiento complejo y crítico. Pero debemos estar preparados para identificar otras formas de neolengua, incluso cuando adoptan la forma inocente de un popular reality-show.

El Ur-Fascismo puede volver todavía con las apariencias más inocentes. Nuestro deber es desenmascararlo y apuntar con el índice sobre cada una de sus formas nuevas, cada día, en cada parte del mundo.

miércoles, 25 de mayo de 2011

Ecofascismo o Ecodemocracia por Serge Latouche


Le Monde Diplomatique 2005
El proyecto de construir una sociedad autónoma y ahorrativa cuenta hoy en día con una amplia adhesión, aunque sus partidarios se enrolen en corrientes diferentes: decrecimiento, antiproductivismo, desarrollo recalificado, y hasta desarrollo sustentable. Por ejemplo, la consigna de antiproductivismo desarrollada por los Verdes corresponde exactamente a lo que los “objetores de crecimiento” llaman decrecimiento 1. La misma convergencia se verifica respecto de la posición de Attac, que en uno de sus folletos propone “evolucionar hacia una desaceleración progresiva y razonada del crecimiento material, bajo condiciones sociales precisas, como primera etapa hacia el decrecimiento de todas las formas de producción devastadoras y depredadoras” 2.
Y de hecho el acuerdo sobre los valores que la necesidad de “reevaluación” 3 vuelve deseables, va mucho más allá de los partidarios del decrecimiento, pues algunos defensores del desarrollo sustentable o del desarrollo alternativo tienen propuestas similares 4. Todos coinciden en la necesidad de reducir de manera importante la impronta ecológica, y por lo demás suscribirían sin problemas lo que John Stuart Mill escribía a mediados del siglo XIX: “Todas las actividades humanas que no generan un consumo exagerado de materiales irremplazables o que no deterioran de una manera irreversible el medio ambiente, podrían desarrollarse indefinidamente. En particular, actividades que muchos consideran como las más deseables y las más satisfactorias –la educación, el arte, la religión, la investigación fundamental, el deporte y las relaciones humanas– podrían llegar a ser florecientes” 5.
Pero vayamos un poco más lejos. En el fondo, ¿quién está contra la defensa del planeta, contra la protección del medio ambiente, o contra la conservación de la fauna y de la flora? En todo caso, ningún dirigente político. Incluso existen empresarios, altos ejecutivos y responsables económicos favorables a un cambio radical de orientación para salvar a nuestra especie de la crisis ecológica y social.
Por lo tanto, es necesario identificar con mayor precisión a los adversarios de un programa político de decrecimiento, los obstáculos que se opondrían a su aplicación, y por último la forma política que cobraría una sociedad ecocompatible.
1) ¿Quiénes son los “enemigos del pueblo”?
Trazar el perfil del adversario resulta problemático, pues tanto las entidades económicas como las sociedades multinacionales que poseen realmente el poder son –por su propia naturaleza– incapaces de ejercerlo directamente. Como lo señala Susan Strange, “actualmente, nadie asume algunas de las principales responsabilidades del Estado dentro de una economía de mercado”6 . Por una parte, big brother es anónimo; por otra, la servidumbre de los sujetos es más voluntaria que nunca, ya que la manipulación que ejerce la publicidad es infinitamente más insidiosa que la de la propaganda... En tales condiciones, ¿cómo enfrentar “políticamente” a la megamáquina?
La respuesta tradicional de cierto sector de la extrema izquierda, dice que una entidad, “el capitalismo”, es la fuente de todos los impedimentos y de todas nuestras impotencias. ¿Es posible el decrecimiento sin salir de esa entidad? 7. La respuesta requiere que evitemos todo dogmatismo, pues de lo contrario no podremos ver claramente los obstáculos.
El Wuppertal Institute propuso varios juegos de tipo “todos ganan” entre la naturaleza y el capital, como el plan Negawatt, destinado a reducir a su cuarta parte el consumo de energía, sin por ello dejar de satisfacer las mismas necesidades. Tasas, normas, bonificaciones, incitaciones y juiciosas subvenciones podrían hacer atractivas las conductas virtuosas, evitando así el derroche a gran escala. Por ejemplo, en Alemania se experimentaron con éxito sistemas de remuneración a los edificios, basados no tanto en el monto de las obras realizadas sino en la eficacia energética de las mismas. Respecto de ciertos bienes (fotocopiadoras, heladeras, automóviles, etc.) el alquiler podría reemplazar la propiedad, y evitar así una carrera desenfrenada hacia la nueva producción, favoreciendo un permanente reciclado. ¿Esto permitirá evitar un efecto de “rebote”, es decir, el crecimiento al final del consumo-materia? No es para nada seguro.
Teóricamente, se puede concebir un capitalismo ecocompatible, pero en la práctica resulta irrealista, pues implicaría una importante regulación, aunque más no fuera para imponer una reducción de la impronta ecológica. El sistema de economía de mercado generalizada, dominado por enormes firmas multinacionales, no se orientará espontáneamente hacia el camino “virtuoso” del ecocapitalismo. Las máquinas de fabricar ganancias, anónimas y funcionales, no van a renunciar a la depredación de no mediar coacciones que las obliguen. Aunque fueran partidarios de una autoregulación, sus directivos no tienen medios para imponerla a los free riders (pasajeros clandestinos), es decir, a la gran mayoría, obsesionada por maximizar el valor de las acciones a corto plazo. Si una instancia poseyera ese poder de regulación (el Estado, el pueblo, una organización no-gubernamental, las Naciones Unidas, etc.) tendría el poder a secas, y podría redefinir las reglas del juego social. En otras palabras, podría “reinstituir” la sociedad.
Claro que es posible concebir y desear cierta limitación del poder por parte del propio poder, como ocurrió durante la era de las regulaciones keyneso?fordistas y socialdemócratas. La lucha de clases parece (¿provisoriamente?) estancada. El problema es que el capital logró imponerse, ganó todas sus apuestas, y debimos asistir impotentes, y hasta indiferentes, a los últimos días de la clase obrera occidental. Estamos viviendo el triunfo de la “omnimercantilización” del mundo. El capitalismo generalizado no puede dejar de destruir el planeta del mismo modo que destruye la sociedad, ya que las bases imaginarias de la sociedad de mercado se apoyan en la desmesura y en el dominio sin límites.
Por lo tanto, no se puede concebir una sociedad de decrecimiento sin salir del capitalismo. Sin embargo, esta expresión cómoda designa una evolución histórica que es cualquier cosa menos simple... La eliminación de los capitalistas, la prohibición de la propiedad privada sobre los bienes de producción, la abolición de la relación salarial o de la moneda, sumirían a la sociedad en el caos, al precio de un terrorismo masivo que sin embargo no alcanzaría a destruir el imaginario mercantil. Escapar al desarrollo, a la economía y al crecimiento, no implica renunciar a todas las instituciones sociales que la economía anexó (moneda, mercados, e incluso el régimen salarial), sino “reinsertarlas” en una lógica diferente.
2) ¿Qué hacer? ¿Reforma o revolución?
Medidas simples, incluso aparentemente anodinas, pueden desatar los círculos virtuosos del decrecimiento 8. Un programa reformista de transición de varios puntos consistiría en extraer las conclusiones “de sentido común” del diagnóstico efectuado. Por ejemplo:
a) volver a una impronta ecológica igual o inferior a un planeta, es decir, una producción material equivalente a la de las décadas de 1960-1970;
b) internalizar los costos de transporte;
c) relocalizar las actividades;
d) restaurar la agricultura campesina;
e) estimular la “producción” de bienes relacionales;
f) reducir el derroche energético de un factor 4;
g) penalizar enérgicamente los gastos de publicidad;
h) decretar una moratoria sobre la innovación tecnológica, hacer un balance serio y reorientar la investigación científica y técnica en función de las nuevas aspiraciones.
El corazón de este programa es la internalización de las “deseconomías externas” (daños causados por la actividad de un agente que traslada el costo sobre la comunidad), en principio conforme a la teoría económica ortodoxa, que permitirá a la sociedad alcanzar niveles cercanos al decrecimiento. Todos los disfuncionamientos ecológicos y sociales deberán quedar a cargo de las empresas que son responsables. Basta imaginar el impacto que tendría sobre el funcionamiento de nuestras sociedades la internalización de los costos del transporte, de la educación, de la seguridad, del desempleo, etc. Esas medidas “reformistas” –cuyos principios fueron formulados por el economista liberal Arthur Cecil Pigou a comienzos del siglo XX– provocarían una verdadera revolución.
Pues las empresas que obedezcan a una lógica capitalista se verían ampliamente desalentadas. Es sabido que ninguna compañía de seguros acepta garantizar los riesgos nucleares, climáticos o vinculados a los OGM. Es posible imaginar la parálisis que generaría la obligación de cobertura del riesgo sanitario, del riesgo social (desempleo), del riesgo estético. En un primer tiempo, dado que muchas actividades ya no serían “rentables”, el sistema quedaría bloqueado. ¿Pero acaso no es precisamente ésa una prueba más de la necesidad de salir del mismo, a la vez que una vía de transición posible hacia una sociedad alternativa?
El programa de una política de decrecimiento es por consiguiente paradójico, dado que la perspectiva de aplicar propuestas realistas y razonables tiene pocas posibilidades de ser aceptada, y menos aún de tener éxito sin una total subversión, lo que exige la realización de una utopía: la construcción de una sociedad alternativa. Esta, a su vez, implica infinitas medidas de detalle, es decir, precisamente lo que Marx se negaba a hacer: la “cocina” en los bodegones del porvenir. Tomemos como ejemplo el desmantelamiento de las sociedades gigantes. Inmediatamente surge una infinidad de preguntas: ¿hasta qué tamaño?, ¿medidas a partir de su facturación o de la cantidad de sus empleados?, ¿cómo asumir los macrosistemas técnicos con unidades de pequeñas dimensiones?, ¿habrá que excluir de entrada ciertos tipos de actividades, ciertas modalidades? 9.
En todos los casos se plantearían innumerables y delicados problemas de transición. Por ejemplo, un gigantesco programa de reconversión podría transformar las fábricas de autos en fábricas de aparatos de cogeneración energética 10. Gracias a ellas muchas residencias alemanas actualmente ya son productoras netas de electricidad en lugar de ser consumidoras. En síntesis, lo que falta no son soluciones, sino las condiciones para adoptarlas.
3) ¿Dictadura global o democracia local?
Las democracias consumistas exigen crecimiento, dado que sin perspectivas de consumo masivo las desigualdades sociales serían insoportables (ya lo están siendo a causa de la crisis de la economía de crecimiento). La tendencia a una nivelación de las condiciones de vida es el fundamento imaginario de las sociedades modernas. Las desigualdades son aceptadas porque se las considera provisorias: el acceso a los bienes que ayer poseían únicamente los privilegiados se generaliza hoy, y lo que hoy es un lujo, mañana estará al alcance de todos.
Es por eso que muchos dudan de la capacidad de las sociedades llamadas “democráticas” para adoptar las medidas que se imponen, y sólo ven como salida una forma de ecocracia autoritaria: ecofascismo o ecototalitarismo. Algunos pensadores de las más altas esferas del Imperio alimentan esa idea como un medio de salvar el sistema 11. Confrontadas a la amenaza de un cuestionamiento de su nivel de vida, las masas del Norte estarían dispuestas a entregarse a los demagogos que prometan protegerlas, a cambio de su libertad, aunque sea a precio de mayores injusticias mundiales y –por supuesto– de la liquidación de una parte importante de la especie 12.
La apuesta del decrecimiento es otra: el atractivo que ejerce la utopía amistosa, sumada al peso de la necesidad de un cambio, es susceptible de facilitar una “descolonización del imaginario” y generar suficientes conductas virtuosas en favor de una solución razonable: la democracia ecológica local.
En efecto, la reactivación del factor local constituye un camino sereno hacia el decrecimiento, de manera mucho más cierta que una problemática democracia universal. El sueño de una humanidad unificada como condición previa al funcionamiento armonioso del mundo, forma parte de la panoplia de falsas ideas vehiculizadas por el etnocentrismo occidental corriente. La diversidad de culturas es sin dudas la condición de un comercio social pacífico 13.
Probablemente, la democracia sólo puede funcionar si la polis es de pequeñas dimensiones y si está profundamente arraigada en sus propios valores 14. La democracia generalizada –según Takis Fotopoulos– supone una “confederación de demoi”, es decir, de pequeñas unidades homogéneas de unos 30.000 habitantes 15. Esa cifra permite, en su opinión, satisfacer de manera local la mayoría de las necesidades esenciales. “Dado el gigantismo de muchas ciudades modernas, probablemente sea necesario dividirlas en varios demoi” 16.
Es decir, que a la espera de la reestructuración territorial propuesta por Alberto Magnaghi, existirán lo que podríamos llamar pequeñas “repúblicas barriales”. Ese autor supone que existirá “una fase compleja y larga (cincuenta o cien años) de ‘saneamiento’, durante la cual ya no se tratará de crear nuevas zonas cultivables ni de construir nuevas vías de comunicación sobre terrenos baldíos o anegadizos, sino de sanear y reconstruir sistemas ambientales y territoriales devastados y contaminados por la presencia humana, y de esa manera crear una nueva geografía” 17.
Una utopía necesaria
Se dirá que es una utopía, y es cierto. Pero la utopía local posiblemente sea más realista de lo que parece, pues las expectativas y las posibilidades provienen de las vivencias concretas de los ciudadanos. “Presentarse a las elecciones locales –afirma Fotopoulos– brinda la posibilidad de comenzar a cambiar la sociedad desde abajo, lo que constituye la única estrategia democrática, contrariamente a los métodos estatistas (que se proponen cambiar la sociedad desde arriba, tomando el poder) y a las aproximaciones denominadas de la ‘sociedad civil’ (que no apuntan de ninguna manera a cambiar el sistema)” 18.
En una visión “pluriversalista”, las relaciones entre las diferentes polities en el seno de la aldea global podrían ser reguladas por una “democracia de las culturas”. Lejos de un gobierno mundial, se trataría de una instancia de arbitraje mínimo entre polities soberanas de estatuto muy diverso. Raimon Panikkar señala: “La alternativa (a un gobierno mundial) que trato de presentar, sería la bioregión, es decir, las regiones naturales donde los rebaños, las plantas, los animales, las aguas y los hombres conforman un conjunto único y armonioso. (...) Es necesario llegar a un mito que haga posible la república universal sin que implique gobierno, ni control, ni policía mundial. Ello requiere otro tipo de relaciones entre las bioregiones” 19.
Sea como fuere, la creación de iniciativas locales “democráticas” es más “realista” que la idea de una democracia mundial. Es impensable derrotar frontalmente el dominio del capital y de las potencias económicas, pero queda la posibilidad de entrar en disidencia. Esa es también la estrategia de los zapatistas y del subcomandante Marcos. La reconquista o la reinvención de los commons (tierras comunales, bienes comunes, espacio comunitario) y la autoorganización de la bioregión de Chiapas, son una ilustración posible, en otro contexto, de la acción localista disidente20 .
Designamos así a los miembros de la Red de objetores del crecimiento para el post-desarrollo (ROCAD: Réseau des objecteurs de croissance pour un après-développement): www.apres-developpement.org
Attac, Le Développement a-t-il un avenir?, Mille et une nuits, París, 2004, pp. 205-206.
La reevaluación es la primera de las ocho "r" (reevaluar, reconceptualizar, reestructurar, relocalizar, redistribuir, reducir, reutilizar, y reciclar), los objetivos interdependientes destinados a desatar un círculo virtuoso de decrecimiento sereno, amistoso y sustentable (Véase Serge Latouche, “Pour une société de décroissance” y “Et la décroissance sauvera le sud”, en Le Monde diplomatique, París, noviembre de 2003 y noviembre de 2004 respectivamente).
Las medidas de autolimitación preconizadas ya en 1975 por la Fundación Dag Hammarskjöld (bajo el nombre de “desarrollo endógeno”) son las mismas que las que proponen los partidarios del decrecimiento: “Limitar el consumo de carne, poner un techo al consumo de petróleo, utilizar los edificios de manera más económica, producir bienes de consumo más duraderos, suprimir los automóviles particulares, etc.” (citado por Camille Madelain, “Brouillons pour l’avenir: contributions au débat sur les alternatives”, Les nouveaux Cahiers de l’IUED, n° 14, PUF, París-Ginebra 2003. p. 215).
Principes d’économie politique, Dalloz, París, 1953, p. 297.
Susan Strange, Chi governa l’économia mondiale ? Crisi dello stato e dispersione del potere, Il Mulino, colección “Incontri”, Bolonia, 1998.
Debate que ya tuvo lugar en La Décroissance, Lyon, n° 4, septiembre 2004.
Sin prejuicio, por otra parte, de medidas de higiene pública como la tasación de las transacciones financieras o la imposición de un techo a los ingresos.
Illich pensaba que existían herramientas fáciles de compartir y otras que nunca lo serían. Véase Iván Illich, La Convivialité, Seuil, París, 1973, p. 51.
Véase Maurizio Pallante, Un futuro senza luce?, Editori Riuniti, Roma, 2004.
Ese tema se discute muy seriamente en el seno de una sociedad semisecreta de la elite planetaria, la organización Bilderberger.
Véase William Stanton, The Rapid Growth of Human Population 1750-2000, Histories, Consequences, Issues, Nation by Nation, Multi-Science Publishing, Brentwood, 2003.
Ver el último capítulo de Justice sans limites, Fayard, 2003.
Takis Fotopoulos, Vers une démocratie générale. Une démocratie directe, économique, écologique et sociale, Seuil, 2001, p. 115.
En la Grecia antigua, el espacio natural de la política era la ciudad, que a su vez reunía barrios y aldeas.
Ibid., p. 215.
Alberto Magnaghi, Le projet local, Mardaga, Bruselas, 2003, p. 38.
Op. cit., p. 241.
Raimon Pannikar, Politica e interculturalità, L’Altrapagina, Città di Castello, 1995, pp. 22-23.
En todo caso, es el análisis que hace Gustavo Esteva en Celebration of Zapatismo, Multiversity and Citizens International, Penang, 2004.